by Imagina MÁS
Share
by Imagina MÁS
Share

A las personas inmigrantes a veces les cuesta usar los servicios sanitarios porque no tienen claro el derecho a las prestaciones que tienen, además de que existe cierto miedo a la discriminación. Por eso no siempre van al médico cuando lo necesitan.
No obstante, cada vez hay más profesionales sensibles a esta realidad que aprenden a conocer mejor y a explicar los derechos de los pacientes.
¿Cuáles son mis derechos?
Para acceder al centro de salud y a los centros especializados necesitas una tarjeta sanitaria. Si no tienes permiso de residencia y eres mayor de 18 años, sólo tienes derecho a la atención en urgencias por enfermedad grave, maternidad o accidente hasta el alta médica.
La ley vigente desde 2012 restringe el derecho de atención sanitaria a las personas que están aseguradas, es decir, cotizando a la Seguridad Social; a sus cónyuges o ex cónyuges, y a sus descendientes -hijos e hijas- menores de 26 años.
También tienen cobertura los descendientes mayores de 26 años si tienen reconocido un cierto grado de discapacidad y dependan de la persona asegurada.
Si no estás asegurado, pero tus ingresos son inferiores a 100.000 € al año, tienes derecho a la tarjeta sanitaria, tanto si naciste en España como si no y tienes permiso de residencia.
¿Y si no tengo permiso de residencia?
Si no tienes permiso de residencia en España, tienes derecho a la tarjeta DASSE -documento de atención sanitaria en situaciones especiales- si eres menor de 18 años, o si eres víctima de trata de seres humanos, sólo si has denunciado y te encuentras en periodo de restablecimiento y reflexión.
Si estás en esta situación y te encuentras mal, acude a Urgencias de tu Hospital o de tu Centro de Salud y pide que te vea un médico o una médica.
Independientemente de tu situación administrativa actual, si tienes una enfermedad transmisible que requiere de un tratamiento prolongado o crónico, como en el caso del VIH, tienes derecho a recibir atención y tratamiento, tal y como se especifica en el Documento de Intervención Sanitaria en Situaciones de Riesgo para la Salud Pública. Necesitas estar empadronado y un informe social que te podemos realizar desde nuestra asociación.
Aspectos que hay que tener siempre en cuenta…
- Las urgencias no son facturables. Al llegar a urgencias tienes derecho a que un profesional sanitario sea quien valore si lo que te ocurre es o no es una urgencia.
- Si te presentan una prefactura, lo mejor es no firmarla. Si lo haces, puedes contactar con Imagina MÁS para que te asesoren de todo el proceso.
- En todo caso, no dejes el asunto sin solucionar. Si no reclamas la factura, aunque no la pagues, figurará como una deuda que puede impedirte regularizar tu situación administrativa.
- Si necesitas tramitar tu tarjeta sanitaria, o quieres hacer alguna consulta, no dudes en consultarnos o pedirnos que te acompañemos. También puedes informarte en tu centro de salud o llamar al 012.
- Si por tu situación legal o administrativa no tienes derecho a la tarjeta sanitaria recuerda que en muchas ciudades hay centros gratuitos donde hacer un control del VIH y otras ITS.
- Tienes derecho a que los profesionales te traten de forma respetuosa. En Atención Primaria tienes derecho a elegir médico en tu centro de salud si no estás cómodo con quien te han asignado.
- Denuncia cualquier maltrato en Atención al Paciente del centro. Sé respetuoso, y exige el mismo respeto para ti.
STAY IN THE LOOP
Subscribe to our free newsletter.
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio