by Xiana Fab
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Si buscas en Google «amor» obtienes 1.460.000.000 resultados.
Si buscas buscas «odio» obtienes 169.000.000 resultados.
El amor gana por más de mil millones de entradas. Un gran número de mujeres que vivimos con VIH sufrimos, o hemos sufrido en algún momento, por falta de amor. Muchas hemos sentido el diagnóstico como una condena que impide sentirse amadas por otras personas y por nosotras mismas. El VIH es uno de los virus más estudiados de la historia de la medicina, del que se conocen las vías de transmsión a la perfección, el que ya no mata y que podemos evitar transmitir tomando el tratamiento o usando una barrera profiláctica tan asequible como un preservativo. Aún así, la convivencia con este virus muchas veces nos convierte, todavía ahora, en mujeres incapaces de sentirse con derecho a encontrar el amor. Tristes y taciturnas, pasamos muchos días dolidas y sintiéndonos culpables. Indefensas, dejamos pasar a personas maravillosas por delante sin atrevernos a gritarles: «¡Ey!, ¡Me encantas! ¡Quiero atreverme a quererte y a que me quieras!». Con la autoestima baja, el sexo se convierte en un asunto del pasado del que ya no podemos disfrutar. No nos deseamos, entonces no nos desea nadie.
Y de repente, como por arte de magia, ese dolor se acaba. Ese sufrimiento silencioso se desvanece. Y nos damos cuenta de que somos hermosas, valientes y que tenemos derecho al amor. A recibir amor. A entregar amor.

Pero, como para tantas otras cosas en la vida, para resurgir suele hacer falta que nos echen una mano. Y para ayudarnos a sentirnos queridas existen proyectos como Love Positive Women. Este proyecto de Visual Aids reune a artistas, activistas y mujeres que viven con VIH en Nueva York, para que juntas hagan a mano tarjetas de San Valentín que enviarán a mujeres que viven con VIH de todo el mundo. Jessica Whitbread es la mujer que comenzó este sencillo pero potente proyecto, y ella misma dice que «encontrar tiempo para hacer algo bonito por otra persona es realmente beneficioso para el conjunto de la sociedad. No infravalores el valor de algo tan simple como enviar una postal a alguien desconocido por San Valentín». En la foto de la portada salgo yo con la mía, recogidita calentita del buzón exactamente el 14 de Febrero. ¡Fue precioso! Ese es el amor que tiene que llenar el mundo. El que entierra hachas de guerra y fuma pipas de la paz.
No sé en qué punto estás de tu camino, pero recuerda que lo que nos pasa en la vida es una lección, y no una sentencia. Busca ayuda si crees que la necesitas. No te encierres en ti misma. Confía en que las nubes negras pasan y sale el sol, y luego vuelven a pasar las nubes negras… Y así, todo pasa. Nada permanece.
Tú, tanto como cualquier otra persona en el Universo, mereces amor y afecto.
Buddha
Un abrazo. Escríbeme por privado si quieres desahogarte. Escríbeme si quieres.
Pd. Si eres una mujer que vive con VIH puedes recibir tu postal por San Valentín! Entra en su página web para estar informada, pero yo avisaré cuando esté llegando la fecha el año que viene.
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Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio
Si se tiene en cuenta que en PubMed, algo así como la Wikipedia de las publicaciones médicas, hay alrededor de 800 artículos que relacionan «mujer VIH y salud mental», puede ser que haya alguna relación. Voy a resumir, libremente y por mi cuenta, un estudio recién publicado por varias mujeres, entre ellas Alice Welbourn. A Alice la conozco personalmente, y verla a ella es verle la cara a la primera generación que se infectó con VIH cuando, esto es otro tópico que se usa mucho, el VIH era una sentencia de muerte. Tan tópico como cierto, lamentablemente.
A ver, para empezar, en inglés se llama «mental health» a la salud mental, pero me parece que no tiene el mismo matiz que aquí, pues se usa de una manera más generalizada, como, digamos, a good mental health sería como tener tu mente en forma. Pues a través de un estudio